lunes, 16 de febrero de 2009

Paraíso y destrucción


Si fue Dios el creador del paraíso, sin duda no fue el que desterró a Adam y Eva negándole a toda la humanidad la posibilidad de ir a ese maravilloso lugar. Siempre hemos tenido paisajes bellísimos a nuestro alrededor y no hemos sabido apreciarlos. La vanidad del ser humano ha destruido poco a poco cada uno de estos rincones. Su ambición ha dejado atrás la humildad, y ha complicado su existencia. Ahora intentamos exprimirnos las neuronas para recuperar todo aquello que destruimos. Pero sigue habiendo gente que piensa que la Tierra no se resiente, que sus recursos son todos renovables y que si no es asi la ciencia se encargará de reemplazarlos por otros.
Sin embargo, ¿llegará el día en el que la mentalidad de la humanidad cambie por completo? o ¿simplemente destruiremos todo aquello que se nos dió y no supimos apreciar?

De momento creo que no vamos muy encaminados.

lunes, 9 de febrero de 2009

¿Estudiar o no estudiar?


Es una difícil elección... A nadie le apetece estudiar, por lo menos a mi no me apetece nunca XD
Pero como dicen todas aquellas personas sujetas a un trabajo aburrido y sin futuro: "tienes que estudiar para tener un buen trabajo, sino acabarás asqueada y malpagada siempre en el mismo curro" Bueno vale tienen razón, pero da mucha pereza levantarse, sentarse delante del escritorio y sacar las cosas de la mochila, ya cuesta bastante levantarse por las mañanas.
Y bueno ¿a que viene todo esto? Pues a que tengo una pila de deberes (la mayoría retrasados jeje) por hacer, y un montón de exámenes para los que estudiar, pero la pereza puede conmigo. Pero me tocará hacer el esfuerzo. Asi que todo esto se resolverá con prisas en el último día para estudiar. Pero bueno es lo que hay (ya se que debería de hacer las cosas con más antelación para llevarlo todo mejor). Bueno ya cogeré habito de estudio, nunca es tarde para empezar ¿no? Asi que voy a hacer algo (y no es dormir Pórunn...)

martes, 3 de febrero de 2009

Dulce sueño, dulce Morfeo


Morfeo ven y abrazame con tus alas de sueño, envuelveme en ellas y haz que la realidad desaparezca. Que se olvide el mundo de que un día habite en él y que se libere mi subconsciente. Deja que vuelen libres mis pensamientos, que sean suspicaces, atrevidos, que se deformen con un soplo de viento y que se reencarnen en otras ilusiones, otras pasiones... Haz que mis sueños vivan sin cadenas dentro de la cárcel de mi conciencia, que sean traicioneros y dulces, amables y asesinos... Deja que se transformen en miles de cosas distintas.

Envenena mis labios para que nunca más despierten en la oscura noche. Encarcela mi cuerpo para que vuele mi alma, dejame vivir mil vidas diferentes con la luz de la luna a mis espaldas...
Ordena que venga el sueño, para que lo inhale y se cuele por los recovecos de mi mente. Así podré huir de la realidad que tanto me atormenta y sumergirme en mis sueños como si en un mar de agua cristalina se tratase. Deja que me desvanezca poco a poco, que el suelo quede bajo mis pies. Dame la posibilidad de volar, de nadar en la fría nieve, de correr por las oscuras aguas del mar.

Porque si tu no me ayudas a escapar de la realidad solo las letras lo harán. No lo harán las frías manos de la muerte, lo harán las mías. Escribiré aquellos sueños que me negastes sentir, viviré todas las vidas que no me quisistes dar. Seré atrevida, fría, suspicaz, y al mismo tiempo plasmaré mis esperanzas y mis anhelos. Sentiré mil veces el frío suspiro del mar, viajaré a rincones del mundos donde nadie ha estado jamás, seré una heroina, una víctima o un simple espectador.

Pero en cada palabra estarás tu, porque le negaste a mi subconsciente ser del todo libre. Lo obligastes a cerrar sus esperanzas con un punto en cada frase, a resumir sus emociones en vagas palabras.
Sin embargo cuando llegue la dulce noche no rechazaré tu abrazo, me quedaré sumida en la cuna de tus alas y cuadno llegue el despertar te anhelaré pero esperaré impaciente que el sol vuelva a caer...

lunes, 2 de febrero de 2009

Nada


Polvo somos y en polvo nos convertiremos. Surgimos de la nada como si fueramos espectros y no somos más que eso, seres solitarios, olvidados y angustiados. No somos más que una insignificante mota de polvo en la inmensidad del espacio. No somos nada y creemos ser mucho. Sin embargo en cada uno de nosotros hay todo un mundo, insignificante y a la vez inmenso. ¿Y como se puede ser algo y a la vez no ser nada? Miles de gotas de agua forman enormes cascadas, miles de piedras hacen surgir grandes murallas y en nosotros miles de cosas diminutas nos componen. Somos todo aquello que nos rodea, somos nuestros pensamientos y somos nuestros miedos. Somos cada recuerdo que tenemos, cada paisaje que hemos visto, cada persona con la que hemos reido y con la que hemos llorado.
Somos cada forma de vida, cada palabra, cada sentimiento, cada escalofrío y cada suspiro. Y por eso aunque vistos desde arriba no seamos nada, vistos desde abajo somos mucho. Así podemos ser algo insignificante y algo inmenso al mismo tiempo. Podemos ser una gota de agua, una hoja caída o cada sonrisa que nos han regalado, haciendonos así más grandes o más pequeños.

Gracias a la gente que me ha hecho a mi más grande y gracias a todas las cosas que me han hecho pequeña.